CAPÍTULO 6:
SESENTA AÑOS DE SONRISAS
CAPÍTULO 5:
CAPÍTULO 4:
CAPÍTULO 3:
Suena Catch & Release a ritmo de Matt Simons…
SESENTA AÑOS DE SONRISAS
Suena "Whatever" de Oasis, las horas y horas de avión se suceden...
Miro por la ventanilla del avión, el sol me saluda, le miro expectante como si me fuera a contar algo. Está vez no vuelvo solo, un ángel me acompaña.
Llevo tiempo para escribir este nuevo capítulo de mi aventura en China. Será corto, pero dedicado a él, el más grande. Jamás pensé escribir unas palabras tan tristes, tres meses que dan para mucho.
Época de cambios y de muchas emociones. Papá se fue, hablo en tercera persona porque así lo hacía él cuando hablaba de si mismo, no puedo evitar reírme recordándolo.
La vida golpea duro cuando uno menos se lo espera, pero esta no se detiene. No tengo más remedio que mirar hacia delante con la mejor de mis sonrisas, todas dedicadas para él. Dice una canción de nuestra tierra "tengo la fuerza del viento del norte", así estoy ahora mismo, preparado para afrontar este temporal que se ha puesto en frente de mí, mirar hacia adelante sin olvidar cada una de sus cosas, todos sus recuerdos fijados en mi memoria y en unas hojas de papel.
Ahora vuelvo hacia a mí otra casa, trabajar y volver a mis rutinas me ayudarán a pasar este etapa de duelo.
Pronto volveré a visitarle y contarle todas mis nuevas cosas. Nos vemos en agosto Papá.
CAPÍTULO 5:
Ya ha comenzado la cuenta atrás. Suena el despertador, maleta en mano y vuelta para Evergrande.
Echo la vista atrás recordando lo que han sido estos 26 días lejos de la escuela. Wuzhou siempre en el recuerdo. Conocer sus costumbres gastronómicas más tradicionales, pasear por sus callejuelas y mercados, el caos de la conducción donde cruzar una carretera es una auténtica aventura, no deja indiferente a nadie.
Cuatro semanas que han dado de sí para disputar el Campeonato Nacional de China U16. Dos semanas de preparación y diez días de competición. Fútbol y más fútbol, sin descanso, la ley del más fuerte.
La pelota echa a rodar, comienza el campeonato, solo vale ser primero. Todo victorias y un empate hasta la última jornada. Llega el gran partido, Luneng, solo vale ganar, duelo de titanes. El partido cuesta arriba 1-0, pero la fe de este equipo mueve montañas. Minuto 49, último córner, gol, victoria y a cuartos.
Comienzan las eliminatorias, no hay respiro. Otra vez toca remontar, otra vez cuesta arriba y otra vez en el 49. Memorable!!!
Llegan las semifinales. Toca sufrir, nada es fácil, empate en el descuento de la segunda, seguimos en búsqueda de nuestra propia suerte, volvemos a hacerlo, gol en el 46 y a la final. Personalidad y garra de campeón.
Llega la cena de Navidad con la final en nuestro pensamiento. La nostalgia de estar tan lejos de casa te invade, pero el gran ambiente de trabajo hace más fácil todo.
Suena el silbato y empieza la gran final, partido de tú a tú contra los ¨gigantes¨ de Xinjiang. Los pequeños detalles marcan la diferencia, esta vez el resultado no nos favorece, pero el buen fútbol no deja indiferente a nadie. Subcampeones de China es el resultado del trabajo de mucha personas. Seguiremos creyendo.
Ahora... mi querida España, ya te siento cerca.
CAPÍTULO 4:
El tiempo pasa muy rápido, los días vuelan y las experiencias se acumulan.
Se cumplen más de dos meses, diez semanas o 68 días desde que aterricé en este inmenso país y abandoné la tierruca.
La pelota sigue rodando, hace tres semanas jugamos la Copa Confederaciones, espectacular el nivel de los peques, es increíble lo que disfrutas viéndoles jugar, mucho talento en sus botas y en sus guantes. Todo victorias hasta la final, aunque el desenlace del último partido nos impidió revalidar el título. Durante el torneo tuvimos la oportunidad de ir al estadio del Guangzhou y ver como ganaban por sexto año consecutivo el campeonato nacional chino. Fascinado por todo lo vivido.
Una semana después, el gobierno de Qingyuan nos invitó todo el fin de semana a conocer la zona norte de la región. Paisajes de ensueño, sitios que jamás imaginé conocer. La cultura Yao, sus verdes montañas, cuevas de colores y ríos que surcan grandes parques naturales.
Sin tiempo para respirar, dos días después rumbo a Hong Kong, un día fue suficiente para subirnos en un tranvía que llegaba al Peak, donde pudimos contemplar la maravillosa metrópoli, la ciudad enamora, a finales de mes continuaremos conociéndola, el gran buda nos espera.
El pasado fin de semana, todos para Guangzhou para presenciar un nuevo hermanamiento de la Escuela Evergrande. Recibimiento por todo lo alto, ceremonia, partido y gran cena.
Difícil describir todas las emociones sufridas a lo largo de estas semanas, pero consciente de mi propia suerte.
CAPÍTULO 3:
Se cumplen cinco semanas de mi aventura en Asía. Todo pasa rápido, más de lo que imaginaba. Los sentimientos se multiplican con la distancia, tu gente y tus cosas, que tesoro tan preciado. Sonrío con el recuerdo de cualquier cosa y una nostalgia feliz invade mi cuerpo. Mi Laredo y mi Santander, vaya dos joyitas.
Una nueva semana, el aroma del café recorre la habitación y las voces de los casi 3000 niños y niñas de la escuela llegan hasta la séptima planta. Me asomo al balcón y me doy cuenta que es hora de ir a recoger el tabao. Paro y sigo escribiendo.
Así es la vida en Evergrande, nuevas rutinas con nuevas personas. La pelota no para de rodar y los entrenamientos continúan día tras día. Pronto llega la copa confederaciones y los élites ya preparan la competición. Con ganas de ver a los porteros en acción contra las mejores escuelas del país. Pero eso, para el siguiente capítulo.
La semana pasada la última conquista: el Imperio del Sol Naciente nos abrió sus puertas. Tokio la urbe más poblada del planeta no decepcionó. Por ser la ciudad del futuro, de las luces de neón, de la gente fashion y ambiente las 24 horas. Por la electrónica y tecnología. Por su sorprendente cultura y por su vida silenciosa. Por ser centro neurálgico de la industria del manga, por sus avalanchas de gente joven, por sus personajes más frikis y pintoresco, por hacerte volver al pasado, donde los grandes carteles luminosos dejan paso a los templos y el maquillaje es sustituido por atuendos más tradicionales. Por sus puestas de sol…
Los viajes lo marcan las experiencias y las personas que se cruzan en ellas, pero como siempre digo: el mejor viaje siempre está por llegar.
La vida continúa y la música sigue sonando…
CAPÍTULO 2:
Ducha y a desayunar. La conversación no da para mucho, saber que con quién hablas, una vez lo coleccionaste en los cromos de Panini.
Agarras las botas y para el campo 26. Los chicos de grado empiezan a asimilar los contenidos y la metodología. La horas se acumulan y así todo es más fácil, tres días a la semana es más que suficiente.
El sol aprieta, son diez de la mañana y llegan los élite, gran suerte la mía. La calidad de estos chavales es enorme. Primeras conversaciones con el jefe de la tropa, un gran tipo predispuesto a ayudarme en todo lo que puede, un fenómeno el navarrico.
Cinco fieras entrenando con la mayor ilusión posible y un “fangi” que se esfuerza por transmitir con pasión cada una de mis palabras. Encantado es poco.
Llega la hora de comer y de comentar con los compañeros, mucha calidad suelta, café y a casa.
La jornada continúa con la preparación de entrenamientos, formaciones y metodología de trabajo, la tarde da para mucho.
Rompiendo con la rutina del trabajo, hace dos semanas tuvimos tres días libres. Xi´an el destino elegido, nunca pensé conocer a los famosos Guerreros de Terracota, una maravilla. Este es el precio de estar tan lejos de tu gente, poder visitar sitios que jamás imaginaste. La ciudad muestra una China popular que contrasta con las grandes urbes más modernas del país como son Sanghai o Guangzhou.
La vida no para y Tokyo abre sus puertas.
CAPÍTULO 1:
Después de la primera semana en China puedo empezar a sacar las primeras conclusiones. Los primeros días han sido muy buenos, aunque el jet lag apretaba y las horas de sueño se acumulaban, los compañeros españoles han facilitado mi adaptación a la Escuela de una manera rápida y sencilla.
Destaco por encima de todo la insufrible y constante humedad, las gafas son inútiles. Pese a todo, te acabas acostumbrando, no hay más remedio.
La primera mañana sirvió para visitar la inmensidad de estas instalaciones que apenas tardaron ocho meses en construirse, los campos de fútbol abundan, cincuenta he llegado a contar. La escuela en los momentos libres te permite hacer multitud de cosas, casi todas ellas relacionadas con el deporte, por opciones no será.
En cuanto al nivel del fútbol estoy muy sorprendido, el trabajo que se lleva realizando aquí los últimos años es muy bueno. En lo que me compete, el grupo de porteros de élite que me corresponde, generación 2005, tiene mucho potencial y estoy seguro que sacaremos cosas muy buenas de ellos pasado los meses. El idioma puede parecer un obstáculo, sin duda lo es, pero el intérprete o fangi pone todo de su parte para poder transmitir cada cosa a los niños. Aprendiendo chino poco a poco.
Este fin de semana estuve en Guangzhou, la tercera ciudad más grande de China con 19 millones de habitantes. Un caos de tráfico, las casas se agolpan y los rascacielos sobresalen entre la ciudad, me ha maravillado, queda mucho por descubrir.
Comienza una nueva semana y, Xian y sus guerreros, el próximo destino.
CAPÍTULO 0:
El 1 de septiembre comenzaré mi aventura en la Escuela Evergrande Soccer School (SOXNA) en Gingyuan, China. Soxna gestiona la academia privada de fútbol más grande del mundo, con casi 3000 niños y más de 50 campos de fútbol. En este proyecto trabajan 22 entrenadores de SOXNA y más de 120 entrenadores chinos. La escuela esta esponsorizada por el grupo inmobiliario Evergrande y está gestionada conjuntamente con la Fundación del Real Madrid.
Evergrande Soccer School
EVERGANDE HA RECIBIDO EL GALARDÓN AL RECORD GUINESS COMO LA ESCUELA DE FÚTBOL MÁS GRANDE DEL MUNDO.
Ciudad de Gingyuan